Vinos Chulos

Algunas uvas fantásticas de la Ribera del Duero han muerto en la creación de este vino.
Muestra algo de respeto.



El tranvía número ocho que recorría Madrid, desde la Puerta del Sol hasta San Antonio de la Florida, era el que utilizaban los típicos castizos y chulapos para ir al baile del Parque de la Bombilla y sobre todo, cada 15 de mayo, en la festividad de San Isidro.
Aquellas mujeres que, rendidas, veían pasar estos “números ocho” llenos de “chulos” fueron las primeras en acuñar esta fantástica expresión. Enfatizando el hecho de que no podía existir algo con más chulería que un tranvía repleto de “chulapos”. Y siendo así el origen de este singular dicho… He aquí el tinto más chulo de toda la Ribera del Duero.
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